Archivo de la etiqueta: amigos

Regalo de Gorio de año nuevo.

Con todo cariño para vosot@s por estar ahí y hacerme disfrutar de momentos mágicos.

¡¡ Feliz año !!

11 comentarios

Archivado bajo R - Gorio - Activo

Tengo que confesarte algo…

Estaba tumbado en la cama con tan solo la parte inferior de su pijama puesto. Con el mando iba cambiando los canales de la televisión sin pararse en ninguno en concreto. Su mente estaba distraída. En ese momento sonaron unos golpecillos en la ventana de su habitación. Miró extrañado hacia ella pues con la tormenta que reinaba en el exterior lo último que hubiese esperado era recibir su visita esa noche. Sin embargo, allí estaba ella, totalmente empapada y haciéndole gestos.

Mientras, apurado, abría la ventana, no podía dejar de pensar en cual sería el motivo merecedor de arriesgarse a un resfriado.

-¿Estás loca? Qué demonios haces viniendo aquí con semejante tiempo?. Vas a pillar un resfriado de narices.

-Fijo que el resfriado será de narices -lo miró sonriendo- creo que no hay resfriados de otro tipo.

Él elevó la mirada al techo haciendo gesto de resignación.

-Es mejor que me quite toda esta ropa empapada. ¿Me puedes prestar una camisa?

Refunfuñando, él se dirigió al armario para alcanzarle una camisa, con la cual ella se fue al baño para cambiarse.

Eran amigos desde niños. Sus casas estaban separadas por algunos metros de jardín y en la preadolescencia habían comenzado con esas escapadas en la noche a la habitación del otro. Pero, últimamente él no se sentía cómodo con aquella amistad. Cada vez le costaba más verla como una amiga y no como la preciosa chica en la que se había convertido.

En ese momento se abrió la puerta del cuarto de baño y apareció ella, vestida tan solo con su camisa. Con una toalla se estaba frotando el cabello; aquella preciosa melena pelirroja.

-Necesito tu ayuda -dijo mientras continuaba con su labor de secado- y es urgente, porque mañana tengo una cita.

Él alzó las cejas con curiosidad. En qué demonios podría ayudarla él relacionado con una cita?.

Ella tiró la toalla hacia el interior del cuarto de baño y se acercó caminando hacia él.

-A lo mejor ya lo sabes, porque me conoces mejor que nadie… pero si no es así… tengo que confesarte algo: no sé besar y… necesito que tú me enseñes.

-¡¡Qué??!! -era lo último que él esperaba que le pidiese- quieres que yo te enseñe a besar?

-Sí. Sabes como soy, que siempre quiero estar preparada para todo, que siempre quiero hacerlo todo bien, y con esto no iba a ser menos. Necesito que me enseñes porque cuando él me bese no quiero quedar de tonta. Quiero hacerlo bien.

-Pero… -se pasó una mano entre el pelo- tú sabes lo que me estás pidiendo? nosotros somos amigos… los amigos no se besan… -se sentía tonto mientras decía aquello. Estaba intentando no distraerse con la idea de que ella estaba totalmente desnuda bajo aquella camisa. ¿Cómo demonios podía ella verlo tan solo como un amigo?

-Por favor. Por favor. Yo sé que tú ya has tenido tus rollitos con chicas y puedes enseñarme. Necesito estar preparada para mañana no estar demasiado nerviosa por meter la pata. -mientras hablaba había apoyado las manos en el pecho desnudo de él y lo miraba implorante.

Él se echó hacia atrás como si aquellas manos le quemasen.

-Vale… pero no me toques -por su voz parecía enfadado, aunque aquel enfado estaba dirigido mas bien hacia sí mismo.

-Bien!! -exclamó ella entusiasmada. Y se quedó quieta mirándolo, esperando que él iniciase la lección.

Él se rascó la nuca mientras la contemplaba. Tenía que besarla… bueno, tenía que enseñarle a besar, con lo cual, para hacerlo… tenía que besarla. Sus ojos se posaron en los sonrosados labios de ella y después la miró serio:

-¿Estás totalmente segura?

-Oh, sí!! venga, no me hagas rogar más.

Él posó su mano en la nuca de ella al tiempo que inclinaba su cabeza para rozarla ligeramente en los labios. Retrocedió ligeramente para mirarla. Ella tenía sus ojos escondidos tras los párpados y parecía esperar que él continuase. Se acercó otra vez para besar primero su labio superior, después el inferior, con los labios ligeramente entreabiertos… después los acarició suavemente con la punta de su lengua, buscando camino para introducirla en su boca. Notó como la respiración de ella se entrecortaba y mariposas de ternura le revolotearon por el estómago conocedor de que aquel estaba siendo su primer beso. Acarició su lengua, provocándola para que la moviese, para que respondiese a sus húmedas caricias… la envolvió, rodeándola, asaltándola juguetonamente y no tardó en sentir la tímida respuesta de la lengua de ella saliendole al encuentro. Esa mínima respuesta fue demasiado y sintió como cierta parte de su cuerpo comenzaba a responder y a demandar. Se apartó rápidamente de ella.

Vió como sus ojos se abrían sorprendidos y lo contemplaban asombrados por aquello que acababa de ocurrir.

Y mientras, él pensaba «mierda, mañana estará haciendo esto mismo con otro»  y sintió como algo se rebelaba en su interior.

SONVAK

10 comentarios

Archivado bajo Sonvak_

Quiero mi polvo !!!!

– ¡Pues búscatelo tú! -le contesté- y si no, ya sabes, a jalear.

 

Estábamos los dos en la barra del bar dónde nos veíamos siempre. Unos vermús, el aperitivo y un poco de charla sobre fútbol y mujeres habían consolidado una relación que nació hace años, al coincidir los dos en la misma empresa. Nuestros caminos, con el tiempo, habían seguido trayectorias distintas, pero nos seguíamos viendo con regularidad.

 

– ¿Jalear?

– Sí hombre, jalear, animar: “Hale manita, hale manita…”

– Eres imbécil. Tengo un problema y tú te lo tomas a coña marinera.

– ¿Problema? ¿Qué problema?

– ¡Que hace meses que no follo! Ni ligo, ni nada de nada. Las tías no me hacen ni caso.

 

Manolo se quedó mirando fijamente a Joaquín. Enfrente tenía un hombre casi de cuarenta años, bien parecido, medianamente alto, con facciones suaves como de niño, rubio, ojos azules y una figura normal. No se mataba en el gimnasio pero tampoco tenía huellas de ser practicante del levantamiento de vidrio en barra fija.

 

         Joaquín, no lo entiendo. ¿Que no ligas? Pero si tampoco es tan difícil…

         Eso será para ti. Tú con esa pinta de chulo, ganando pasta y con lo cabronazo que eres, te las llevas de calle. Yo, en cambio…

         ¿En cambio, qué? Tú eres normal, hasta guapo diría yo, y no me entiendas mariconadas ¿eh? ¿Por qué no vas a ligar?

         Porque no sé, tío, porque no sé. Siempre acabo siendo un gran amigo de la tía que me quiero tirar. Pero yo no quiero ser su amigo, joder, ¡quiero follar con ella! Tú no las haces ni puto caso, las puteas, y las tienes embobadas. Sin embargo, yo hablo con ellas, me intereso por su vida, por sus preocupaciones, me desvivo por quedar bien y me terminan contando lo que les duelen los ovarios cuando les viene la regla ¡No te jode!

         No sé, será que usas una técnica equivocada…

         ¿Técnica? ¿Hay técnicas? No me fastidies. Cada mujer es un mundo, es un ser individual, distinto de las demás, diferente a todas, con unos valores, experiencias que la hacen ser única…

         ¿…Y?

         ¡Coño, pues que no puede haber “técnicas” para ligar! Cada una responderá a unos estímulos diferentes, a unos resortes, como consecuencia de sus inquietudes y deseos…

         Joer, Joaquín –le interrumpí- Pero tú, ¿quieres follar o escribir un tratado de psicología?

         ¡Vete a la mierda!

         Es que te complicas mucho. Vamos a ver. Si tú ves a Charlize Theron ¿qué es lo primero que se te ocurrecharlize_theron1_300_4003?

         Que está buenísima.

         ¿Y que más?

         Bueno… sí, que me apetecería tirármela…

         Correcto. Sin embargo, es una gran actriz, ganadora de un Oscar y nominada a otro, bailarina de ballet, modelo… Además, con una historia truculenta pues nació en la República de Sudáfrica en pleno apartheid, vivió todos los momentos convulsos de su país en esos años y además, a los 16, presenció el asesinato de su padre a manos de su madre, provocado por los continuos ataques y amenazas de muerte que éste le hacia a ella. Sin embargo, con esa historia detrás, a ti solo se te ocurre follártela. ¿Por qué?

         No sé, es algo animal, es puro instinto. Es verla en la pantalla y ¡¡ufffff!!

         Ya. Pues algo de ese “uuffff” debe de ser lo que a ti te falta. Si lo que quieres es simplemente follar con una tía, déjate de rollos y ve a lo que vas.

         ¿En plan de bailas o follamos?

         Mira que eres animal, tronco. Las cosas no se preguntan, simplemente surgen.

         Vale. OK. Pero sigo sin entenderlo. No soy un atleta pero no estoy gordo. Soy un tío sensible, inteligente, buen conversador, que me preocupo por conocerlas…

         Oye Joaquín. ¿Tú vives solo, no?

         Si ya lo sabes cabrón. ¿Cuántas veces no me has pedido el piso para ir con tu ligue de turno sin que se entere tu parienta? Claro que sí.

         Y ¿qué tal te desenvuelves como “amo de casa”?

         Perfectamente. Al principio tenía una asistenta pero no hacían nada así que ahora, organizándome bien, lo hago yo todo.

         O sea: limpias, lavas, cocinas, friegas, planchas…

–    Y quito el polvo, doblo la ropa, arreglo averías, sí, ¿y?

         Y tres cosas clave: ¿sacas la basura, haces la cama y bajas la tapa del “water”?

         Hombre claro… ¿quién lo va a hacer si no?

         Pues macho, tengo la solución.

         ¿…?

         Joder, cásate. Ligar no ligas, pero como pongas un anuncio diciendo lo que sabes hacer, vas a tener cola en la puerta de tu piso para casarse contigo.

         Serás cabrón.

         ¡Piénsalo! Es tu solución.

         Ja, ja, ja. Al menos así follaría.

         Que te lo has creído. Así ya no tendrías que salir a ligar y gastarte las pelas invitando en discotecas. Pero ¿follar? Como mucho, los sábados cuando tocase. O es que no has oído el refrán de “follas menos que un casado

Próximo turno: N- Sonvak – Activo

14 comentarios

Archivado bajo Aspective_

No se lo deseo a nadie

No se lo deseo a nadie, el título del artículo le viene como anillo al dedo a Sandra. ¿no la conocéis?, pues es una pena, es buena chica, aunque no creo que Sandra se deje conocer y es que Sandra ha cambiado muchísimo, ya no es aquella niña alegre, optimista, contenta, divertida e incluso pizpireta a la que le gustaba estudiar y destacar en todo lo que hacía, porque tenía un lema «las cosas o se hacen bien o no se hacen», ya no es aquella niña que se exigía demasiado hasta el punto de enfadarse con ella misma si en Física y Química sacaba un 9 en vez de un 10.
Sandra ya no va a fiestas, no baila, no sale con sus amigas, no se pinta la cara, no se fía de la gente, elige cuidadosamente a quien contarle algo de su vida y aun así se lo piensa dos veces antes de hacerlo. Sandra ahora se refugia de sus penas detrás de unos escritos, es una persona adulta a la que la vida le ha robado casi todo, le robó un amargo día de primavera a su mejor y más fiel amigo, su perro, le robó el trabajo, le robó la familia, le robó un amor imposible y casi le roba la propia vida. Se ha vuelto una persona seria y comedida, ya no ríe como antes, sus grandes ojos color miel están tristes y cuando menos se lo espera lloran, le da igual destacar, aunque sigue manteniendo su lema de niña «las cosas o se hacen bien o no se hacen». Sandra, es dura con ella misma y se culpa de todo lo ocurrido, sin pensar que las cosas pasan porque tienen que pasar, aún así, Sandra no ceja en su empeño y siempre está dispuesta a aprender, levemente sonríe cuando alguien la felicita por algo, desde hace algún tiempo Sandra tiene algún nuevo amigo que sin saberlo la ha ayudado mucho y que le gustaría conocer en persona pero no se atreve a decírselo, porque piensa que la entiende y la comprende. A Sandra le falta cariño, le falta calor humano, Sandra se siente sola en medio de la gente y piensa que si la soledad prolongada no es buscada, puede parir estas cosas.

lágirmas derramadas

¿Hasta cuándo? Se pregunta Sandra

 D – Rosma – Activo

12 comentarios

Archivado bajo Sandra