Buenas noches, dulce niña…

La Universidad Pablo de Olavide (UPO), una Universidad que hay en Sevilla, enviara esta medianoche un sms con la nota de Selectividad a cada uno de los estudiantes que se han examinado en alguna de sus tres sedes durante los pasados 16, 17 y 18 de junio. Esto fue una noticia que aparecio en el Diario de Sevilla el 23 de junio pasado. Resulta que en la UPO, abreviativo que nunca me gustó y con conocimiento de causa porque estudié allí (me lo reservo para otro post claro, como los/las grandes gurus de los programas rosas, léase Paris Esteban, Belén Hilton o el puto padre apeles de los cojones), han tenido la gentil idea de…bueno llegado a este punto del texto hay que ser muy torpe para no haberla leído ya. Habrá de todo digo yo, pero imagínense esas supuestas niñitas,imberbes, (no lo he comprobado personalmente, absténganse enfermos de las demandas y de las visitas a los juzgados por las mañanas porque son mayores de edad, creo, no me acuerdo ni me interesa, y tengo novia felizmente mayor que yo, por poco pero mayor que yo) con el corazón en la boca y los ojos casi cerrados, rodeado de su familia humilde, trabajadora, sencilla «Papa si me quedo dormida coge tu el móvil porfa» , «No hija, tienes que ser responsable y esperar a que te den la nota, ha venido toda tu familia para este momento incluido tu abuela Agustina en vuelo charter desde la residencia», si la niña es responsable pero su naturaleza o la sociedad o ella misma han hecho que su hora de dormir sean las diez de la noche, por ahora, y llegada esa hora el padre no tiene mas remedio que decirle «Buenas noches, dulce niña«, darle un beso en la frente y taparla para que no se enfrie. Ese seria el «Ging» y el «Gang» seria ese peazo de aparente niñato con los pantalones por los suelos, y que conste que no tengo nada contra ellos, de hecho en mi época era al contrario los llevábamos a dos cuartas del suelo y cuanto mas para arriba mejor, en fin cuanto mas carajote mejor y yo el number uno claro. Ese aparente niñato, que a esa hora la música del bar de copas de su barrio no le permite escuchar el sonido de ningún mensaje que no viniera con bomba incluida, si ese que vemos todos los días y no falla, los padres tienen la de Ubrique (nada que ver con Jesulinas aptas para hacer la mudanza de una ópticas por ellas mismas) hasta los topes vaya y ese día no sabe nada de ese-eme-eses, por supuesto, porque esta también con sus colegas, por ejemplo, o con su querida o viendo ganar al Madrid cualquier bolo de verano con CR9 que juega sin calzonas y las gradas a reventati con tomati.

Y llega ese sms. Y nuestro supuesto niñato comprueba al día siguiente que no ha superado las pruebas y que además se le había olvidado que ayer le mandaban el dichoso sms. En fin, nada que ver con esa supuesta niñita que a las doce en punto recibe el sms con su notable y toda la familia le hace una fiesta y le abre los ojos con ilusiones, «Va a ser el primer Medico de la familia»……y hace su carrera de Medicina y al cabo de los años, los suficientes ni mas ni menos, monta su consulta y por cosas de la vida tiene entre sus pacientes al padre de nuestro supuesto niñato con arritmias en el corazón y el colesterol por las nubes, además padece de insomnio y la cabeza la tiene a las tres de la tarde, todo ello consecuencias lógicas de una vida acelerada en su primera fase y con una cuesta del caracol en el medio y en el final. Nada que ver con el padre de nuestra supuesta niñita que gracias a las penurias no sabe ni lo que significa realmente la palabra colesterol ni falta que le hace, una vida pausada al principio pero muy alargada, sin sobresaltos, la que quería vivir ni mas ni menos. Que cosas tiene la vida ¿no?, un día estando nuestra niñita cerrando la puerta de su consulta resulta que llega un señor con una mochila y un montón de cajas con artículos, los vende de puerta en puerta pero su aspecto no parece el de alguien que se gana la vida con eso.

En definitiva que como bien sabemos todos, el tiempo pone a cada uno en su sitio y el que rie hoy mañana no reirá porque le tocara a otro y papa arriba y mama abajo, la decisión esta ahí a unos les llega muy pronto y para otros en su justo momento. Nuestra supuesta niñita, que ya es una mujer, médica y responsable ve en el un niñato, porque se le ve que ha desaprovechado muchas oportunidades en la vida, precisamente las que el no ha tenido -«¿Oiga quiere comprarme un porta móvil para el coche?»- y nuestra doctora le pregunta el precio -«Son 20 euros»-. Si nuestra doctora le compro la caja o no, la verdad me trae sin cuidado, ahora no me digan ustedes que la situación no era para que se sacara un cigarrillo y le dijera a nuestro niñato – «¡Dame fuego 20 euros!». Y cuando el le dijera «¿como?» le respondiera «que si quieres un cigarrillo». Como aquella pelicula de Groucho Marx cuando le preguntaba a una mujer si se acostaria con el por veinte millones de dolares y le dijo que sí claro y despues le preguntó si se acostaria con el por 20 dolares y ella le dijo que si se creía que ella era una puta….»Eso ya lo dejamos claro antes ahora estamos negociando el precio«.

(Saludos a todos)
 
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